Los sistemas de protección solar controlados mediante automatismos son realmente eficaces para contribuir al ahorro energético de un hogar. Un cristal libre de protección solar transmite un 30-80% de los rayos solares y, en cambio, con protección solar automatizada (toldo) sólo dejar pasar un 10-20% de los rayos solares. Contribuyendo a reducir la temperatura hasta 8º en el interior, reduciendo a la misma vez la utilización de sistemas de climatización (entorno al 24%). Menor consumo de electricidad y menor emisión de CO2.